Desde mañana comenzará a aplicarse la “Ley Silla”

A partir del martes 17 de junio, entra en vigor una reforma que representa un cambio significativo en las condiciones laborales en México. La medida, conocida como “Ley Silla”, tiene como objetivo mejorar la calidad del entorno de trabajo, en particular para quienes desempeñan sus funciones de pie durante periodos prolongados.

Esta normativa, que modifica los artículos 132 y 133 de la Ley Federal del Trabajo, establece la obligación para los empleadores de proveer sillas con respaldo que permitan a los trabajadores sentarse cuando la actividad lo permita o durante lapsos de descanso. La disposición aplica en todos los sectores: desde comercios minoristas y grandes superficies, hasta servicios de seguridad, oficinas administrativas y puntos de atención al público.

La reforma está diseñada para mitigar los efectos físicos adversos derivados de permanecer de pie durante largas jornadas. Entre las principales dolencias que se busca prevenir se encuentran trastornos musculares, desgaste articular, problemas circulatorios y dolor crónico en la espalda.

Los sectores más beneficiados por esta nueva obligación incluyen a trabajadores como cajeros, vigilantes, cocineros, personal de limpieza, panaderos, operadores de taquilla, meseros, y otros oficios que tradicionalmente no contaban con espacios adecuados para el reposo.

El marco legal establece un periodo de 180 días naturales para que las empresas realicen las adecuaciones necesarias en sus reglamentos internos y condiciones físicas de trabajo. Paralelamente, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social deberá emitir lineamientos específicos sobre riesgos posturales, con un plazo máximo de 30 días a partir de la entrada en vigor de la ley.

Las consecuencias por el incumplimiento de esta disposición pueden ser significativas. Las multas oscilan entre 250 y 2,500 veces el valor de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), lo que representa sanciones de entre 28 mil y más de 280 mil pesos. En casos graves o reincidentes, podría incluso aplicarse la suspensión temporal de actividades.

La implementación de esta ley responde a una necesidad urgente en el país: según estimaciones recientes, el 45% de los trabajadores mexicanos realiza su jornada completamente de pie, lo que representa un riesgo constante para su salud física a largo plazo.

Con esta reforma, se busca establecer un nuevo estándar en las condiciones mínimas de bienestar laboral, promoviendo entornos más dignos, saludables y humanos para la fuerza laboral del país.